Nuevamente la sociedad rosarina festejó la condena a cárcel común, perpetua y efectiva a tres genocidas de la última dictadura. El jueves 27 de diciembre, por tercera vez, desde que a raíz de la lucha popular y el incansable trabajo y compromiso de los organismos de DDHH se reabrieron los juicios a los genocidas; miles de rosarinxs y nicoleñxs nos reunimos en el abrazo y la emoción que brinda la justicia que, aún tardía, pone fin a la impunidad.
Iniciado el 3 de julio de este año, el juicio donde se juzgaban las causas de la Masacre de la calle Juan B. Justo, ocurrida en noviembre de 1976; las nueve desapariciones de militantes de la Juventud Peronista-Montoneros , ocurridas entre abril y mayo de 1977; y el caso de José María Mastroberardino, el locatario de la casa donde vivía el matrimonio Almada-Spotti; tenia como imputados a: Jorge Muñoz, Manuel Fernando Saint, y a Antonio Federico Bossié.
El tribunal compuesto por los jueces Omar Digerónimo, Beatriz Caballero de Barabani y Jorge Venegas Echagüe, tras meses de audiencias y testimonios puso fin al primer juicio que condena a genocidas por delitos cometidos en la vecina ciudad de San Nicolás. Las condenas a cárcel común, perpetua y efectiva, son fruto del excelente trabajo llevado adelante por las diversas querellas y la Fiscalia. Esta condena, es el puntapié inicial en el largo camino que nos queda por recorrer en la lucha por memoria, verdad y justicia, y en ese sentido, esperamos que la efectivización de las mismas sea en el plazo más corto posible.
Acompañamos con nuestro abrazo a todos lxs testigxs, familiares, sobrevivientes y militantes que ayer demostramos una vez más que lxs 30.000 están presentes en cada una de nuestras luchas, en todas nuestras banderas y en nuestrxs cuerpos que festejan cada histórica sentencia sabiendo que el camino es largo y el compromiso inquebrantable.
Espacio de Derechos Humanos
Frente Popular Darío Santillán
regional Rosario
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