Marcha del Orgullo: ¡En la lucha, hasta que todxs seamos libres!

El pasado viernes 30 de septiembre participamos de la 4ta Marcha del Orgullo LGTTBI de Rosario, evento político en el que quienes formamos parte de la comunidad lgttbi de nuestra ciudad, y todxs quienes apoyamos la lucha contra la opresión heteronormativa, nos convocamos con mayor masividad año a año. Este 2011 con el especial estímulo para festejar y seguir luchando que fue para todxs nosotrxs la enorme conquista del matrimonio igualitario.

Es así que nuevamente, el viernes ganamos las calles, hicimos oír nuestras voces y ver nuestros cuerpos, cuestionando lo que nos dicen que debemos hacer y cómo debemos ser. Porque sabemos que el movimiento lgttbi ha conquistado los derechos que hoy poseemos con la lucha, y seguiremos ese camino para alcanzar todo lo muchísimo que aún nos falta.

Marchando, festejamos porque la aprobación de la Ley de Matrimonio Igualitario fue un paso importantísimo en la ampliación de derechos de lesbianas y gays, en el reconocimiento por parte del Estado de que no puede discriminarnos en función de nuestra orientación sexual, en la amplificación de nuestra visibilidad y voz, en la derrota de todos aquellos sectores que, con la Iglesia a la cabeza, hace siglos nos imponen un “deber ser” autoritario y estigmatizante, de sexualidad “normal” y de familia heteronormativa y patriarcal.

Pero a su vez somos concientes de lo muchísimo de libertad e igualdad que nos falta, como resultado de un sistema heteropatriarcal y capitalista que nos oprime de múltiples formas que se inscriben en nuestras relaciones, cuerpos y subjetividades, pero al que le oponemos nuestras alegres y diversas rebeldías. En las calles, en las plazas, en las casas, en las camas...

Y por esto, marchando, también luchamos por una Ley de Identidad de Género que defienda a quienes no nos identificamos con el género que nos fue asignado al nacer, y necesitamos del reconocimiento del Estado para acceder a nuestros derechos básicos constantemente vulnerados.

También exigimos la efectiva implementación de políticas públicas integrales que combatan la violencia machista, la mercantilización del cuerpo de mujeres y niñas, la mortalidad de las mujeres por abortos inseguros, y todas las formas de violencia que siguen descargándose contra lesbianas, gays y trans.

Para esto, nos parece fundamental construir un movimiento de lucha por nuestros derechos como comunidad lgttbi que se sustente en nuestra organización autónoma, desde abajo, militante, solidaria con todas las luchas de lxs oprimidxs. Esta será la única garantía de que sigamos avanzando por todo lo que nos falta, por todo los derechos que este Estado sigue sin garantizarnos, como lesbianas, gays y trans, pero también como mujeres, trabajadorxs, jóvenxs, desocupadxs, excluidxs, como pueblo que no se resigna con "lo que hay", y quiere dignidad y justicia social para todxs.

Por esto rechazamos todo intento de cooptación de nuestras luchas por los gobiernos de turno, sea nacional, provincial o municipal, y no confiamos ni delegamos en quienes dicen representarnos, pero en realidad se transforman en representantes de los gobiernos en nuestro movimiento. Repudiamos toda injerencia estatal en las actividades de lucha que como movimiento construimos, así como todo “aparateo” de organizaciones sostenidas por el Estado, como se vio sobradamente en la marcha y descaradamente encima del escenario.

Así también rechazamos todo intento de licuar nuestras demandas tras discursos y estéticas vaciadas de contenido. Más aún, que vinculan nuestra lucha con intereses mercantiles como el turismo o el consumo “gay friendly”.

Indudablemente, también nos parece un error, el de quienes tras una crítica a estas políticas, no hacen más que reforzarlas, al montar un increíble escenario de confrontación irrumpiendo en el recorrido de la Marcha, y antagonizando la genuina reivindicación de libertad de compañeros luchadores detenidos, con el masivo y político (y sí, ¡festivo!) orgullo de quienes nos estábamos movilizando. No es así compañerxs que avanzaremos en un movimiento lgttbi cada vez más transformador y combativo.

Porque luchamos contra todas las formas de explotación y opresión, consideramos fundamental rechazar un sistema que nos oprime por razones de clase, pero también de género, orientación sexual, raza y edad. Porque luchamos por la emancipación completa y total de nuestros pueblos, luchamos con alegre rebeldía por la autodeterminación, la soberanía, y la igualdad en la diversidad, hasta que todxs seamos libres.