viernes, 31 de diciembre de 2010

De cal y arena (Balance del sector de Trabajadores/as asalariados/as del FPDS Rosario.)


   A lo largo del año las trabajadoras y los trabajadores asalariados de la ciudad y la región llevamos adelante distintas luchas. En algunos casos se trató de la defensa de nuestros puestos de trabajo, en otros fuimos por un aumento salarial que nos garantice una vida más digna a nosotros y a nuestras familias.

Arriba las manos, esto es el Estado (sueldos bajos y precarización laboral)

   En febrero comenzó el conflicto con los docentes y el resto de los empleados públicos. El gobierno “progresista” de Binner ofreció un miserable 7% de aumento, cuando la inflación es por lo menos el doble, y Santa Fe es una de las provincias más ricas de Argentina. La respuesta de los trabajadores fue un plan de lucha conjunto, que incluyó paros y movilizaciones, sobre todo en Rosario, con AMSAFE y ATE a la cabeza. Fue tan pobre el ofrecimiento y tal la bronca por abajo, que hasta las conducciones burocráticas provinciales de esos sindicatos –mucho más acostumbradas a caminar los pasillos ministeriales que a dialogar con los trabajadores de base- tuvieron que ladrar un poco para conservar cierta legitimidad.
   Finalmente, se votó en la legislatura provincial un Fondo Salarial de Emergencia, con lo que las autoridades provinciales consiguieron más fondos para aumentar el ofrecimiento al 22%. A pesar de la posición contraria de AMSAFE y ATE Rosario, que exigían un aumento del 30% para acercarse más a la canasta familiar, las direcciones provinciales aceptaron la propuesta.   

   A fin de año, los trabajadores y trabajadoras municipales de la Secretaría de Promoción Social organizados en ATE llevaron adelante la lucha por la continuidad laboral de 22 ludotecarios. Las ludotecas son espacios de contención social de niños y niñas de las barriadas populares, y sus trabajadores tienen un contrato temporario de marzo a diciembre –por lo que en verano se quedan sin trabajo- además de que no tienen obra social y no cobran el aguinaldo ni otros beneficios sociales. Luego de distintas intervenciones culturales frente al palacio municipal y las sedes de distrito, las compañeras y compañeros pudieron torcerle el brazo al secretario Fernando Asegurado, quien se negaba sistemáticamente a contemplar sus reclamos. Como fruto de su lucha, el trabajo de los ludotecarios no depende ya del Presupuesto Participativo sino que dependerán de la Dirección de Infancias, además de que aquellas y aquellos que ingresaron en el 2007 pasarán a planta.           

Patrones privados de vergüenza, trabajadores privados de empleo

   Uno de los conflictos más importantes de la ciudad y la región fue el de los trabajadores y trabajadoras de prensa del Multimedios La Capital. A fines de marzo, directivos del grupo encabezados por el empresario mendocino Daniel Vila y el ex ministro del Interior menemista José Luis Manzano despidieron a 26 trabajadores de las radios LT3 y LT8. Buscaban un doble objetivo: sacarse de encima elementos díscolos –que habían osado pronunciarse públicamente a favor de la nueva Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual- y, al mismo tiempo, reestructurar los medios de acuerdo al criterio de polivalencia –según el cual un solo trabajador tiene que hacer lo que antes hacían dos, o tres.
   Pero hubo resistencia. Los trabajadores del diario La Capital comenzaron un paro solidario con sus compañeras y compañeros de las radios. Se realizaron masivas movilizaciones, donde se reflejó el acompañamiento de la sociedad rosarina. Además, el conflicto se nacionalizó, con la intervención directa del ministerio de Trabajo de la nación y dirigentes kirchneristas de primera línea como el diputado Agustín Rossi o el en su momento secretario general de la CTA Hugo Yasky. Luego de una negociación directa con las autoridades nacionales, la empresa dio marcha atrás con su decisión y los trabajadores continuaron en sus puestos de trabajo.

   Sin embargo, hubo también otras luchas donde el panorama no ha sido tan favorable para los trabajadores. En el caso de Paraná Metal y Sancor, las patronales han apostado por el desgaste y la desmoralización de los compañeros y compañeras, embarrando permanentemente todas las instancias de negociación.
   Con respecto a la metalúrgica de Villa Constitución, a pesar de la firmeza de los operarios para defender los 900 puestos de trabajo –que incluyó el corte durante semanas de la autopista Rosario-Buenos Aires- la patronal, encabezada por el empresario kirchnerista Cristóbal López pudo imponer un esquema de reducción de personal, mediante el cual sólo continuarán 340 obreros. A pesar del acuerdo, la planta sigue cerrada y los trabajadores no saben aún cuál será su futuro.
   En el caso de los empleados de la empresa láctea, la lucha comenzó luego del despido de 5 trabajadores con actividad sindical, a lo que se sumaron 6 correspondientes de una contratista de Sancor. La patronal utilizó la resistencia obrera a los despidos como excusa para vaciar la planta y trasladarla a Gálvez. Ante esto, los trabajadores debieron sostener el corte en el puente Rosario-Victoria para reabrir las instancias de negociación. El 22 de diciembre, luego de que el ministerio de Trabajo provincial decretara la conciliación obligatoria, los trabajadores levantaron el corte en el puente como gesto de buena voluntad. Al cierre de esta edición, el conflicto sigue abierto. 

  
   Seguramente el 2011 también será un año de luchas de trabajadoras y trabajadores. Desde La Fragua y el conjunto del Frente Popular Darío Santillán buscaremos hacer un humilde aporte a todas aquellas que busquen sueldos más dignos, mejores condiciones laborales, y más libertad y democracia sindical, con el convencimiento que las y los de abajo podemos organizarnos colectivamente para cambiar las cosas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario