viernes, 31 de diciembre de 2010

En todxs nosotrxs, en todas partes

El sábado 17 de julio murió nuestro compañero Duilio Giovanello, militante del Santiago Pampillón-Frente Popular Darío Santillán, como producto de un accidente cerebro vascular. Duilio estudiaba psicología, y formaba parte del área de prensa del Pampillón y del FPDS Rosario. Participaba también en la organización de actividades académicas en la facultad, como por ejemplo las Jornadas Desmanicomializadoras. Una semana antes había cumplido 29 años. Aquí, unas palabras de recuerdo de un amigo y compañero:







¿Cómo pensar


la pérdida


de un amigo,


de un compañero,


de una persona con la que viví momentos


de los más extraños,


los que vivimos juntos


y donde descubrimos cosas:






formas:


de pelear por la libertad


de hacer música


de pasarla bien


de hacer humor


una manera de entender la locura


la relación con los otros,


con las otras


y entre nosotros.






Cambiaste mucho desde que te conocí.






Siempre fuiste una persona que quisiste ser mejor.






“A veces el narcisismo te deja ciego y hacés mal a las otras personas”


No te justificabas y decías que tenías que cambiar.


Contra las personas que piensan que no se puede cambiar nada ni nadie.


Ni uno


ni el mundo.






Construir una relación con los otros donde uno se ponga en cuestión.


Quisiste cambiar y cambiaste.


Soy uno de los testigos. No es para librarte de pecados, nosotros no funcionamos con esa lógica.


No estás en el cielo. Estas en todas partes.






Estás,


como me dijo tu vieja,


en todxs nosotrxs.






Te extraño


y quiero volver a hacer lo que hacíamos






Me parece que fue una persona que supo aprender y supo enseñarnos muchas cosas


que las cosas no dependen ni deben depender de unx solx y, por lo tanto, había que construir un nosotrxs que se proyecte y, para eso, había que poseer herramientas colectivas para intervenir con más fuerzas…


Entonces estabas


en la facu


en una casa


en un bar


donde sea


haciendo eso.






Y con muchísima alegría.


Haciendo muchos chistes


(un poquito ácidos algunos, pero “un poquito” y “algunos”)






Nos hacías reír mucho.






Con la música nos encontrábamos mucho


Me gustaba tocar cuando tocabas la batería


Me divertía verte


Golpeándole con mucha fuerza, exagerando, haciéndote la estrella de rock.


Y entonces todos nos hacíamos la estrella también,


Y así,


nos la creíamos un poco.






En estos días estuve con gente


que te quiere


que te va a extrañar


y que no quiso que pase lo que pasó.

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